Naturaleza, medio ambiente, salud, tiempos lentos: Cerdeña intenta volver a empezar desde una nueva idea de turismo. La receta de los municipios insulares para un "Manifiesto de la Cerdeña resiliente"

Browse
Cala di Volpe

La pandemia lleva a la industria turística de la isla a repensar el destino Cerdeña y el modo de promoverla. Desde Santa Teresa di Gallura comienza el desafío para el fin de la crisis. Playas, restaurantes, instalaciones de alojamiento turístico, la relación con la comunidad anfitriona: el Coronavirus rediseña las reglas de acogida  e impulsa hacia un turismo basado en la naturaleza, el medio ambiente, la salud,  el tiempo de relajación. Stefania Taras, concejala municipal de Turismo, propone el "Manifiesto de la Cerdeña resiliente". Para ella "el mensaje será que en Cerdeña son posibles vacaciones seguras y restablecedoras". El objetivo , en el cual centrarse después de tantas indecisiones , es el de "construir un modelo de turismo más atento y que valore más el medio ambiente".

Mantener la distancia en la playa y en los locales, reorganización de estructuras y servicios, saneamiento , el turismo convertido en experiencia en lugar de transformar la vida de la comunidad anfitriona. "Y la sanidad se convierte en una prioridad", es el primer punto del Manifiesto pospandemia. “¿El final del confinamiento comienza desde Cerdeña? Solo con la condición de claras garantías, y mientras siempre que la isla se reinvente y se promueva de una nueva manera", es el llamamiento de la consejala a los 150 Ayuntamientos sardos censados como turísticos. "Nuestra primera economía fuente de ingresos es el turismo y está seriamente amenazada", afirma. La idea es "tener un proyecto y mantenerse sólidos frente a la Región y el gobierno, que tendrán que tomar medidas extraordinarias", afirma.

Los números son de emergencia social. Para el Observatorio sobre los presupuestos del 2018 de las SRL del Consejo y de la Fundación Nacional de Contables, en 2020 en Cerdeña la facturación del sector tendrá un quebranto de 514 millones de euros: 325 millones los alojamientos y 188 millones la restauración. El confinamiento ha sido un mal necesario, pero el daño es enorme.

Desde Costa Smeralda parte el mensaje cargado de optimismo de Franco Mulas, gerente de área de Marriott Costa Smeralda, en una entrevista concedida a La Nuova Sardegna en la que se dice, entre otras cosas, que el exclusivo destino para vacaciones de lujo está "listo para volver a empezar desde junio". En el sur de Cerdeña el poscoronavirus se llama "Per", un proyecto ético de renacimiento que apunta a la web, que involucra a Cagliari y Villasimius y propone relaciones vecinales, la solidaridad y la ética de hacer negocios en alternativa a los colosos del comercio en línea.

La ciencia frena. "Está excluida la transmisión del virus en el medio marino, pero cada predicción es prematura", dice Stefano Vella, médico, científico y miembro del comité técnico-científico que apoya a la Región. "Para hacer previsiones todavía son necesarios algunos unos meses –opina-, en abril y mayo se obtendrán los datos para saber si de verdad el virus está desapareciendo". Según Vella, "la baja densidad de población ha ayudado a Cerdeña", pero con el distanciamiento, las mascarillas y otras precauciones "será necesario convivir aún durante mucho tiempo" y hacer predicciones "es arriesgado". Entre otras cosas, con el turismo "se arriesga a  nuevos contagios – subraya-, antes matemos el virus".

Argomenti
Turismo
29/04/2020